miércoles, 8 de agosto de 2012

Barrabás

En Jericó no te gusta mi nombre,
en Serbia te gusta platicar conmigo,
en el Sena y Camberra 
me llamas de cualquier forma obscena.
Apuesto te gustaría tener sexo,
en serio debería combinar mi nombre.

Voltea el plato, 
quiero imaginarte de otro modo,
ser de neón y brillar en la noche
y que mi pene alumbre tu vagina.

Nada te gusta mucho más que Degas, 
excepto mi nombre.
Cambiate hoy y llámame Barrabás,
torname camaleón y sigueme llamando
sujeto para no gastar mi nombre... pero
antes llámame Barrabás.

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